No puedes dirigirte a tu destino sin un punto de partida y un mapa. Cuando se trata de mujeres que trabajan en el sector minero, la falta de datos significa que no sabemos dónde nos encontramos.
Aunque los gobiernos y las instituciones internacionales recopilan y comparten cada vez más datos, un desafío persistente surge del hecho de que la industria minera abarca habilidades específicas de la minería, así como aquellas que son comunes a otros sectores. Además, no todos los países definen la minería de la misma manera y las estadísticas nacionales no siempre están desglosadas por género. Incluso cuando lo hacen, esto suele limitarse a una división total por género. Por lo tanto, los datos de las oficinas nacionales de estadística por sí solos no necesariamente pueden proporcionar una comprensión profunda de la realidad que viven las mujeres en el sector.
Si bien la mejor fuente potencial de datos es la propia industria minera, las empresas normalmente no recopilan ni divulgan este tipo de información para uso externo.
Las mujeres deben ser escuchadas en el lugar de trabajo y vistas en los datos para seguir mejorando la diversidad, la gobernanza y la sostenibilidad en el sector.
Sin los datos, no está claro, por ejemplo, si las nuevas tecnologías como la automatización y la digitalización crearán más oportunidades para las mujeres o exacerbarán las existentes. escasez de habilidades. Esta falta de pruebas contundentes ha sido señalada con frecuencia por responsables políticos y expertos, incluso en la Segunda Conferencia Mundial sobre Género en el Petróleo, el Gas y la Minería del Banco Mundial.
En International Women in Mining (IWiM), esta situación proporcionó todo el impulso que necesitábamos para lanzar el Las mujeres y la mina del futuro (WMF) con un grupo diverso de socios.
Socios del proyecto Mujeres y la Mina del Futuro
- Foro Intergubernamental sobre Minería, Minerales, Metales y Desarrollo Sostenible
- Organización Internacional del Trabajo
- Mujeres Internacionales en la Minería
- Programa de las Naciones Unidas para la gobernanza ambiental
Construyendo la línea de base
Como se han recopilado relativamente pocos datos sobre género, es difícil hacer recomendaciones válidas para reformar el sector. La primera fase del proyecto WMF establecerá datos de referencia iniciales para sentar las bases de futuras medidas de mitigación de riesgos.
Durante esta primera fase, nos centraremos en 11 países que ya cuentan con buenos datos: Australia, Brasil, Canadá, Chile, Colombia, Ghana, Mongolia, Perú, Sudáfrica, Suecia y Zambia. Utilizaremos estos datos para determinar la situación del empleo desglosado por género por ocupación, educación, edad, habilidades, salario y nivel de antigüedad en el sector minero a gran escala.
Conocemos la naturaleza del problema, pero necesitamos una respuesta más concreta y concertada.
Si bien las fuentes de datos variarán entre países, los datos oficiales recopilados por las oficinas nacionales de estadísticas y los ministerios de minas serán clave para compilar datos confiables y comparables a nivel mundial. Para complementar nuestro análisis, incorporaremos datos disponibles de empresas mineras y otras fuentes, incluidos consejos y cámaras de minerales, así como asociaciones de empleadores. El proyecto también aprovechará datos de organizaciones internacionales y no gubernamentales como la Iniciativa para la Transparencia de las Industrias Extractivas, el Banco Mundial, el Foro Económico Mundial y el Consejo Internacional de Minería y Metales. Cuando sea relevante, el proyecto compilará estudios de casos que destaquen datos a nivel de la industria o muestren iniciativas a nivel de proyecto para mejorar las condiciones laborales, las oportunidades de empleo y la representación general de las mujeres en el sector minero.
Al final de la primera fase, el proyecto producirá un conjunto de informes nacionales para evaluar políticas y datos relacionados con el empleo y las habilidades en el sector minero a gran escala. Además, se compilará un informe global para mostrar una comparación entre países de los informes mencionados anteriormente, extrayendo lecciones de las mejores prácticas y ofreciendo recomendaciones específicas y directrices de políticas para abordar los múltiples desafíos que enfrentan las mujeres en el sector minero.
¿Qué tipo de datos necesitamos?
En última instancia, necesitamos datos granulares y desglosados que puedan desglosarse por género. Estos datos requieren interpretación, además de mediciones y seguimiento consistentes a lo largo del tiempo. Este tipo de datos se puede agregar y desagregar según sea necesario. También puede informar estrategias y acciones concretas como ajustes específicos. Es importante destacar que proporciona información con suficiente especificidad y conocimiento para obligar a los tomadores de decisiones a tomar medidas inmediatas.
¿Por qué necesitamos estos datos?
Hay muchas maneras en que estos datos granulares pueden conducir a mejores resultados sobre el terreno. Por ejemplo, las empresas mineras suelen medir a los empleados por género en términos de antigüedad, cuántos son contratados y por categoría laboral. Pero es poco probable que tengan los datos para medir cuántas empleadas son graduadas en ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas (STEM) dentro de cada función y cómo están progresando en comparación con otros. Los datos básicos pueden permitirle medir cuántos ascensos se otorgan a mujeres, pero no pueden proporcionar información más profunda, como cuántas promociones se otorgan a mujeres negras o indígenas. Estos dos ejemplos ilustran las muchas formas en que los datos mejorados pueden formar la base para mejores prácticas en el sector.
Acción concreta
Se necesitan datos transparentes, gratuitos y accesibles y la colaboración entre todos los actores para lograr la igualdad de género y el empoderamiento de las mujeres y las niñas. Conocemos la naturaleza del problema, pero necesitamos una respuesta más concreta y concertada.
Las mujeres deben ser escuchadas en el lugar de trabajo y vistas en los datos para seguir mejorando la diversidad, la gobernanza y la sostenibilidad en el sector. Con los datos correctos a mano, las partes interesadas pueden seguir investigando, discutiendo y desarrollando soluciones a los importantes problemas de igualdad de género en la minería.
El proyecto WMF es un paso en el camino hacia la igualdad de género en el sector minero; esperamos que pueda acompañarnos en el viaje.
Para obtener más información sobre el proyecto WMF, comuníquese con: Secretaría@IGFMinería.org.
Barbara Dischinger es directora y fundadora de Mujeres Internacionales en la Minería (IWiM), una organización global líder sin fines de lucro que busca la igualdad de género y promueve las voces de las mujeres, el acceso a oportunidades y el liderazgo en la minería.